El camión 2

Ayer ya no pude llegar, se me complicaron las cosas y no lo ví. Le ofrecí disculpas de una manera en que no pusiera resistencia jeje. Y también quedamos de vernos hoy a la misma hora de siempre.

Hoy desperté con tiempo, me arregle y tenía duda en que ponerme...no le iba a dar todo de un jalón, así es que descarte la falda. Me puse un pantalón ajustado, una blusa rosa y un suéter negro.

Al subir mi pantalón me di cuenta de que el no podría meter con libertad su mano, así es que lo baje un poco más abajo de la cadera y salí de casa.

Llegué a la base del transporte, lo esperé y cuando lo ví que venía me subí al camión y el detrás de mí.

Busqué un lugar cómodo (no sabía dónde, en cualquier parte había gente) por fin me senté y el se sentó junto a mi. Esperó a que se llenara el camión y cuando avanzó comenzó a rozarme la pierna.

Ya sabíamos exactamente lo que seguía, así es que me relajé y disfruté.

Su respiración se agitó (definitivamente no más que la mía) cuando notó que tenía la libertad de acariciar en medio de mis piernas. Acariciaba lentamente hasta que llegó a mi entrepierna, me estremecí un poco pero ya no había marcha atrás

Pasó sus dedos por encima de mi vulva haciendo pequeños movimientos circulares, en ocasiones presionaba un poco y eso me ponía mas caliente aún. Un gemido fue la aprobación para avanzar.

El, sin pensarlo dejó de sobar mi vagina para hacer el segundo paso, con gran agilidad metió los dedos al interior de mi pantalón, hasta llegar justo al lugar donde ya tenía un rio entre las piernas y decidió ir metiendo uno de ellos...

Creo que se me salieron 2 o 3 gemidos más pero yo aposté a que la gente dormía y no quise parar pero terminaría en un charco, entonces lo detuve. El quito su mano y comenzó a oler su dedo, me reí creo por vergüenza y emoción.

El jaló mi mano hacia su verga y....vaya que estaba excitado él también. Lo acaricié por encima de su pantalón como 30 o 40 seg pero sentía que era muy obvio mi movimiento y paré.

El acomodó su mochila y en cuanto volví a verlo, ya la tenía afuera. No pude resistir y la toque, la apreté, la cachondeaba pero...insisto, soy muy torpe para unas cosas, así es que deje que el hiciera el resto.

Para motivarlo un poco abrí mi escote, y también le mostré el inicio de mi vulva. Cuando el sintió que estaba a punto de acabar jalo mi mano para que yo siguiera y termino en ella.

Muy gentil (y hábil también) saco un poco de papel y me lo ofreció. Limpie mi mano y su verga. Terminé de limpiar mi mano y el sobrante lo chupé, creo que le gustó.

Tengo la impresión que esto no va a quedar solo en toqueteos y chaquetas.

Cuando bajé de la unidad volteé a ver nuestro lugar de travesuras y pude apreciar que un señor sentado atrás de los asientos que ocupábamos me sonreía pícaramente... No dudo que hayamos tenido un espectador de primera fila.

Rony D’Faccio

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